miércoles, 17 de octubre de 2018

La historia de cómo los directivos de Toys 'R' Us salvaron la filial de la península ibérica

Hace unos meses, una noticia entristecía a los niños (y no tan niños): la desaparición de Toys ‘R’ Us. Una liquidación que, aunque se hizo realidad en Estados Unidos, finalmente no alcanzó a España. Todo gracias a la cúpula directiva de la filial ibérica de la juguetera.

Ahora, Toys ‘R’ Us pertenece en un 60% al fondo portugués Green Swan y en un 40% a los citados directivos. Un logro que les ha costado sangre, sudor y lágrimas, como contaba Paulo Andrez, representante del fondo luso. El proceso de negociación con los fondos buitre dueños de la compañía estadounidense fue duro, pues tenían intención de liquidar la filial.


Pero el equipo directivo consiguió mantener activa la filial hasta encontrar un inversor que asegurase su futuro, según ElPaís.com. El director general de la filial, Jean Charretteur, ha calificado la historia de la salvación de Toys ‘R’ Us en la península ibérica como digna de Hollywood.

“Contra las decisiones e instrucciones de Estados Unidos, decidimos salvar la empresa”, señaló Charretteur. El primer paso fue solicitar el concurso de acreedores de Toys ‘R’ Us Real State, la dueña de muchos de los establecimientos de la compañía, “para proteger los edificios” de las garras de los fondos buitre.

Pero, para conseguirlo, la filial tenía que reclamar una deuda a Real State, ya que debía haber dos acreedores. Asimismo, declararon el concurso de dos sociedades tenedoras de las acciones de la filial, con la intención de evitar que los fondos les arrebatasen el control. Durante todo este proceso, el despacho Cuatrecasas les asesoró legalmente.

Entonces, con el tiempo suficiente para conseguirlo, encargaron al Banco Rothschild la tarea de encontrar un inversor. “Fue un proceso largo y complicado hasta encontrar a Green Swan”, señaló. “Estuvimos un año sin crédito, pero logramos pagar en tiempo y formar a los proveedores, porque teníamos que ser solventes”. La operación final asciende a 80 millones de euros en cuatro años.

A cambio de un canon, la compañía podrá seguir utilizando la marca, mantenida por su notoriedad.

El representante de Green Swan admite que al principio no confiaba en que el proyecto saliese adelante, pero comprendió la capacidad del equipo. Asimismo, ha querido agradecer a los sindicatos y a la plantilla su compromiso por mantener en marcha la compañía. “Al final, vencimos a los fondos buitre. La conclusión es Toys ‘R’ Us 1- Fondos 0”.

De cara al futuro, el equipo pretende abrir más establecimientos en el centro de las ciudades, reforzar el e-commerce y reformar los locales. Si lo consiguen, estarían evitando los errores que cometió la compañía matriz de la que se han conseguido salvar.

Vía: Marketing Directo

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