En el día a día fruto de los picos de trabajo, las prisas, y la carrera por la consecución de los objetivos, se generan ciertas tensiones que de no limarse suelen generar un ‘clima de trabajo’ muy difícil de gestionar, y por extensión, muy pernicioso para el engranaje del equipo.
Teniendo presente esta situación, son cada vez más las empresas que organizan actividades fuera del horario laboral (o incluso utilizando un día laborable) para realizar una actividad de ocio conjunta con el objetivo de ‘hacer piña’. Siendo muy importante la manera en la que se organice para lograr el objetivo de manera exitosa.
Este tipo de actividades no se han de considerar nunca de obligatorias, correspondiendo su iniciativa al responsable del equipo, teniendo especial cuidado en la forma en la que se comunica, puesto que todos los miembros deben sentirse en igualdad de condiciones, evitando de este modo que nadie se sienta excluido.
Dentro del abanico de posibilidades que se presentan, son preferibles los deportes de equipo o en los que se desdoblan en dos equipos, aprovechando la ocasión para integrar dentro del mismo a aquéllos compañeros menos afines, para así potenciar una buena relación entre estos.
En conclusión, y teniendo en cuenta mi experiencia, esta es una de las maneras más efectivas, divertidas y elegantes para mejorar el clima de trabajo, al posibilitar a los compañeros una novedosa apreciación de sus colegas, logrando separar debidamente las relaciones personales de las profesionales, desplazando muchas de las tensiones y prejuicios acumulados con el paso de los meses.
En Pymes y Autónomos
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